5 posturas para hacer el amor en el baño y disfrutar al máximo
Hacer el amor en el baño puede ser una experiencia placentera, pero hay parejas que aún no lo han comprobado. Te proponemos 5 posturas para que te animes.

Quizás pienses que hacer el amor en el baño no es el lugar más cómodo para tener relaciones sexuales con una pareja. No obstante, resulta idóneo para tener una experiencia diferente y excitante. Por esto mismo, no está de más darle una oportunidad a este espacio del hogar de vez en cuando.

Aunque hay que tener en cuenta que se debe tener más cuidado debido a las características del sitio, tomando precauciones y conociendo bien las diferentes posturas sexuales que se quieren ejecutar para tener un apasionado momento, no debería haber más que diversión y placer. ¡Descúbrelas!

¿Qué saber antes de hacer el amor en el baño?

Hacer el amor en el baño es una de tantas formas de acabar con la rutina sexual adquirida por estar en la habitación, tal y como describe Antoni Bolinches en su libro Sexo sabio.

Las mejores posturas para hacer el amor en el baño

¿Estás ansiosa por hacer el amor en el baño? Conoce algunas de las posturas que puedes practicar.

1.Romántica

En primer lugar, esta es una de las posturas preferidas para tener sexo en la ducha. Es segura, permite disfrutar de penetraciones profundas y resulta excitante para ambos.

Para realizarla, ella apoya los brazos contra la pared. Mientras, su pareja la acaricia y penetra desde atrás.

2. Perrito

La clásica posición de perrito es perfecta para tener relaciones sexuales en el baño. No hay riesgo de caídas, no requiere demasiado esfuerzo y, por supuesto, es idónea para tener

“sexo salvaje”.

Ella se apoya en cuatro sobre un tapete o toalla.Su pareja, arrodillado, la penetra desde atrás. Mientras tanto, él también la puede sujetar por las caderas.

3. Contra la pared

Para empezar, es importante tener en cuenta que esta postura es de más exigencia física. Su práctica debe realizarse con cuidado, puesto que un mal movimiento puede acabar en una caída.

Para realizarla, ella apoya su espalda en la pared y entrelaza sus piernas en el cuerpo de él.

Él hace la suficiente fuerza para mantenerla en el aire.

4. AcostadosLas posturas clásicas también son opciones. Si el baño es lo bastante amplio, es válido ejecutar posturas acostados; como el misionero o el dominante.Cualquiera de los dos se recuesta en el suelo, mientras que la otra persona toma el control del asunto. El plus de estar mojados en la ducha, sin duda, será de lo más excitante.

5. Sentados¿Hacer el amor en la ducha te resulta incómodo o complicado? Una postura perfecta para hacerlo en el baño es sentados sobre el inodoro.

Él se sienta en el inodoro y ella se pone encima, con la posibilidad de moverse a su antojo sin perder estabilidad.Atrévete a practicar estas posturas sexuales para hacer el amor en el baño¡No te olvides de calentar!

Hay diferentes formas de ser creativos en el baño con los juegos preliminares. Usar el jabón para masajearos o daros caricias mientras ambos se duchan. Y si quieres prolongar el encuentro, aprovecha el momento de secado para seguir con la acción en la comodidad de la habitación.

¿Aún no has salido de la habitación?

¿Qué te parece si le sorprendes mientras se ducha?

Beneficios de hacer el amor en la ducha

Además del cambio en la rutina, el ingrediente de la ducha aporta:

Sensualidad.

La humedad, la oportunidad de emplear jabones y fragancias y de recorrer el cuerpo de la persona amada, convirtiendo las caricias en hidroterapia y exfoliación, le incluye un plus al sexo que no tiene en espacios convencionales.Ahorro. Bañarse juntos pudiera ahorrar agua y tiempo. Es como un delicioso trabajo en equipo, Win-Win.

Escape anti estrés. Aunque suene paradójico hacer el amor en la ducha tiene un contenido extra de intimidad. A veces la sala de baño resulta un espacio para apartarse de la cotidianidad, escurrirse juntos entre risas y picardía, le imprime a la estrategia un ingrediente que puede resultar pleno y gratificante.

Cuerpo a cuerpo. En el baño estaríamos más cerca de zonas del cuerpo de la persona amada que en otras condiciones pasarían desapercibidas, para la propia persona incluso.

Por ejemplo, la espalda. Alguna mancha, irritación o absceso quedaría a la vista o al tacto. No es exactamente la idea, pero no es descabellado pensar que de una caricia a la auscultación solo hay un paso.Confianza. La intimidad tiene sus grados. Dormir juntos es una suerte de nivel superado en una pareja. Pero el baño en pareja habla de una intimidad distinta o superior.

La cercanía y, por ende, la confianza aumentan en la ducha.Te podría interesar…4 posturas sexuales en la ducha

Mejor con Salud